El Archivo Histórico Arquidiocesano de San José conserva, entre sus numerosos fondos documentales, algunos de carácter personal, es decir, conjuntos de documentos producidos o recibidos por un individuo en el ejercicio de su actividad privada, que en nuestro caso proceden de personas ligadas a la Iglesia, especialmente sacerdotes y obispos. Son, por ejemplo, los fondos de los obispos Ignacio Trejos Picado y Antonio Troyo Calderón y del sacerdote Juan de Dios Trejos Picado, entre otros que podríamos citar. Estos fondos personales, en nuestro archivo, se caracterizan por su reducido volumen y, en algunos casos, por encontrarse sus documentos, o haberse encontrado hasta ahora, mezclados con los documentos de carácter oficial propios de las actividades de sus creadores en la Arquidiócesis de San José. Por eso, este año nos hemos dado a la tarea de iniciar la identificación, organización, descripción e instalación de los documentos personales de los obispos de San José, trabajo que ya ha
La cofradía fue y es una asociación eclesiástica de fieles, principalmente (aunque no exclusivamente) de laicos, devotos de una advocación religiosa (Carmela Velázquez: Diccionario de términos coloniales , 2009), relativa a Cristo, a María o a un determinado Santo. En la Edad Moderna constituyó la principal forma de asociacionismo, al mismo tiempo que tuvo una multiplicidad de finalidades, entre ellas: Promover el culto a su advocación, procurar el mejoramiento espiritual de sus miembros, socorrer a los asociados en las circunstancias propias de la enfermedad y la muerte o realizar actos de misericordia (como la atención a huérfanas o a enfermos). Desempeñaban demás importantes funciones no expresadas en sus estatutos, relacionadas con la sociabilidad y la definición identitaria de sus miembros. Las reformas borbónicas y liberales de los siglos XVIII y XIX mermaron ciertamente la transcendencia de esta forma de asociacionismo, que no obstante no desapareció. A Hispanoamérica la cofrad